Ken Salazar advierte: ley eléctrica podría generar un sinfín de litigios
Los comentarios del diplomático se dan luego de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación declaró más temprano constitucionales los cambios
El embajador de Estados Unidos, Ken Salazar, consideró que la Ley de la Industria Eléctrica que impulsa el presidente Andrés Manuel López Obrador y que este jueves fue declarada constitucional por la Suprema Corte de Justicia de la Nación abrirá la puerta a litigios sin fin, generando incertidumbre y obstruyendo la inversión.
En una declaración difundida por la embajada estadounidense, el diplomático agregó que dicha ley tendrá, además, impactos en la competitividad de América del Norte.
Dijo también que el gobierno de Joe Biden espera que el marco jurídico resultante de la discusión en el Congreso apoye la creación de una América del Norte que sea potencia de energía limpia, que proteja las inversiones actuales y futuras de empresas estadounidenses en México conforme a las obligaciones de México bajo el Tratado México-Estados Unidos-Canadá (TMEC).
Asimismo, afirmó que espera proteja la integración de las cadenas de suministro México-Estados Unidos en favor de la prosperidad de la región.
“Esperamos que cualquier marco jurídico establezca un claro compromiso con el combate a la crisis del cambio climático, y con proveer energía limpia, barata y accesible para todos” , subrayó Salazar.
El embajador, agregó, sin embargo, que su país está comprometido a trabajar con México para hacer de América del Norte una potencia energética que encabece al mundo en el combate a la crisis climática y produzca abundante energía limpia con tecnología solar, geotérmica, hídrica, eólica y otras energías limpias.
Estas tecnologías de energía limpia – afirmó- pueden impulsar una cadena de suministro integrada en América del Norte, como se visualizó durante la Cumbre de Líderes de América del Norte. Mis colegas y yo hemos abogado en favor de esta visión de que América del Norte se consolide como una potencia de energía limpia.
Por último, reiteró que Estados Unidos respeta la soberanía de México y sus procesos democráticos.